Un médico gerontólogo o geriatra es un profesional de la salud especializado en el estudio del envejecimiento y los cuidados de las personas mayores, existen para fines prácticos licenciados en gerontología y médicos geriatras. Este campo de estudio se enfoca en el bienestar físico, mental y social de los adultos mayores, así como en la prevención y tratamiento de enfermedades y discapacidades asociadas con la edad. Aunque la gerontología y la geriatría no son exactamente sinónimos para fines de atención médica, son similares y serán usando de forma indistinta.
El geriatra tiene una serie de responsabilidades clave en el cuidado de los adultos mayores. Una de las principales responsabilidades es evaluar y diagnosticar las condiciones médicas y de salud específicas que afectan a los pacientes de edad avanzada. Esto implica realizar exámenes físicos exhaustivos, revisar el historial médico y realizar pruebas diagnósticas para identificar y tratar enfermedades y afecciones comunes en esta población, como la demencia, la osteoporosis y las enfermedades cardiovasculares.
Además de diagnosticar y tratar enfermedades, el médico gerontólogo también es responsable de coordinar la atención médica integral de los pacientes mayores. Esto implica trabajar en estrecha colaboración con otros profesionales de la salud, como enfermeras, fisioterapeutas y trabajadores sociales, para desarrollar un plan de atención personalizado que aborde las necesidades médicas, emocionales y sociales de cada paciente. El geriatra también puede colaborar con los familiares y cuidadores para brindarles orientación y apoyo en el cuidado de los adultos mayores.
Además, el geriatra desempeña un papel fundamental en el cuidado paliativo y el manejo del dolor en los pacientes mayores. Esto implica evaluar y tratar el dolor crónico, así como brindar apoyo emocional y espiritual a los pacientes y sus familias durante el proceso de enfermedad terminal. El geriatra también puede ayudar a los pacientes a tomar decisiones informadas sobre el final de la vida y proporcionar cuidados de calidad y compasión en esta etapa.
Formación académica necesaria para convertirse en médico geriatra o gerontólogo
Para convertirse en geriatra, es necesario completar una formación académica específica. Primero, se requiere obtener un título de médico general, lo que implica completar una licenciatura en medicina en una universidad acreditada. Durante este programa de estudios, los estudiantes adquieren conocimientos básicos en anatomía, fisiología, farmacología y otras áreas médicas fundamentales. Además, también se les enseñan habilidades clínicas y de diagnóstico para evaluar y tratar a los pacientes.
Después de obtener el título de médico general, el siguiente paso es realizar una residencia en medicina interna o en medicina familiar. Esta residencia tiene una duración de tres años y proporciona una formación más especializada en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades en adultos. Durante este período, los residentes adquieren experiencia práctica en el manejo de pacientes mayores y en el abordaje de problemas de salud comunes en esta población.
Una vez completada la residencia en medicina interna o medicina familiar, los médicos interesados en convertirse en geriatras deben realizar estudios de geriatría. Este ciclo tiene una duración de uno a dos años y se enfoca en brindar una formación adicional en el cuidado de los adultos mayores. Los médicos adquieren conocimientos especializados en el manejo de enfermedades crónicas, el uso adecuado de medicamentos en personas mayores, la prevención de caídas y otras áreas específicas de la gerontología.
Además de la formación académica, es importante destacar que los médicos gerontólogos también deben desarrollar habilidades interpersonales y de comunicación efectiva. Trabajar con pacientes mayores requiere empatía, paciencia y la capacidad de establecer una relación de confianza. Los médicos geriatras también deben estar actualizados sobre los avances médicos y las mejores prácticas en el cuidado de los adultos mayores, por lo que la educación continua y la participación en conferencias y cursos de actualización son fundamentales para mantenerse al día en este campo.
Condiciones médicas más comunes
Una de las condiciones más comunes es la demencia, como la enfermedad de Alzheimer. Esta enfermedad neurodegenerativa afecta la memoria, el pensamiento y el comportamiento de los pacientes, y requiere un enfoque especializado para su diagnóstico y tratamiento. Los geriatras también tratan otras formas de demencia, como la demencia vascular y la demencia por cuerpos de Lewy, entre otras.
Otra condición médica común es la fragilidad. La fragilidad es un estado de salud en el que los adultos mayores son más vulnerables a sufrir caídas, fracturas y otras complicaciones debido a la disminución de la reserva fisiológica. Los geriatras evalúan y tratan la fragilidad mediante intervenciones que incluyen ejercicios de fortalecimiento, terapia ocupacional y ajustes en la medicación para minimizar los riesgos y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Además de la demencia y la fragilidad, también tratan enfermedades crónicas comunes en los adultos mayores, como la hipertensión arterial, la diabetes, la osteoartritis y la osteoporosis. Estas condiciones médicas requieren un manejo cuidadoso y adaptado a las necesidades de cada paciente, teniendo en cuenta su edad, estado de salud general y posibles interacciones medicamentosas.
Adicionalmente, el médico geriatra también se ocupan de trastornos del equilibrio y la marcha, incontinencia urinaria, depresión, ansiedad y problemas de sueño, que son comunes en los adultos mayores. Estos problemas pueden tener un impacto significativo en la calidad de vida de los pacientes y requieren una evaluación y tratamiento adecuados. Los geriatras utilizan enfoques terapéuticos que incluyen terapia física, terapia ocupacional, cambios en el estilo de vida y medicamentos, según sea necesario, para abordar estos problemas de manera integral y mejorar la funcionalidad y bienestar de los pacientes.
Día del Médico Geriatra
El Día Internacional del Médico Geriatra se celebra el 21 de marzo de cada año. Este día se dedica a reconocer y honrar la labor de los médicos especializados en geriatría, que se encargan de cuidar y atender la salud de los adultos mayores.
En Venezuela, el Día del Médico Geriatra se celebra el 15 de septiembre. Esta fecha fue elegida por la Sociedad Venezolana de Geriatría y Gerontología (SVGG) en 1986, en honor al natalicio del Dr. Joaquín Quintero Quintero, considerado el pionero de la geriatría en Venezuela.
Durante esta jornada se realizan diversas actividades, como conferencias, talleres y campañas de información, con el fin de difundir conocimientos y brindar herramientas para mejorar la calidad de vida de los adultos mayores.
Otro día de importancia en esta rama es el 29 de mayo, donde se conmemora a los adultos, seres que han recorrido vida, y durante ella con dedicación y esfuerzo han sacado a sus familias adelante
Especialistas afines
El médico gerontólogo o geriatra suelen trabajar en estrecha colaboración con numerosos otros especialistas, actuando como eje central en la recuperación y mantenimiento de la salud de los adultos mayores, entre sus colaboradores más frecuentes se encuentran neumonólogos, internistas, cardiólogos, nefrólogos, fisiatras, psiquiatras, psicologos, reumatólogos, traumatologos, etc. El envejecimiento de la población es un tema cada vez más importante en todo el mundo, y los gerontólogos desempeñan un papel crucial en la promoción de la salud y el bienestar de las personas mayores.
Links de Interés
Instituto Nacional de Geriatría
Definición y objetivos de la geriatría (PDF)